Caminar por Quito es recorrer más de 480 años de historia viva, en una ciudad que mira al futuro sin olvidar su pasado.
Fundada sobre antiguos asentamientos andinos y abrazada por volcanes, Quito conserva el centro histórico mejor preservado de América Latina. Declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad en 1978, la ciudad combina templos coloniales, plazas que fueron escenarios de revoluciones y callejones que aún susurran leyendas.





En la época del Virreinato, Quito se convirtió en un punto clave de comercio, arte y pensamiento en los Andes. Sus calles eran escenario de procesiones solemnes, tertulias intelectuales y mercados vibrantes que reunían culturas de todo el continente.





Hoy, la capital ecuatoriana combina su herencia histórica con una energía cosmopolita. Rascacielos, parques urbanos y barrios vibrantes conviven con mercados tradicionales y festivales que celebran la diversidad.