Español
Historia inicial
La historia de la Iglesia de Santo Domingo se remonta a 1541, cuando la Orden de los Dominicos llegó a Quito con la misión de evangelizar. Años más tarde, en 1581, comenzó la construcción del convento bajo la dirección del arquitecto Francisco Becerra, convirtiéndose rápidamente en un importante centro religioso, educativo y cultural de la ciudad, reconocido por su influencia en la vida colonial quiteña.
Arquitectura exterior
En su arquitectura exterior se observa una combinación de estilos renacentista y barroco. Su imponente torre campanario fue una de las más altas de la época, destacando en el perfil urbano de la ciudad. La portada de piedra tallada, con relieves de gran detalle, muestra figuras religiosas y elementos decorativos que enmarcan el ingreso. Todo el conjunto se levanta frente a la Plaza de Santo Domingo, marcando un punto de referencia tanto espiritual como arquitectónico en el centro histórico.
Arquitectura interior
El interior del templo presenta una planta basilical de tres naves acompañadas de capillas laterales. Los retablos, recubiertos con pan de oro, reflejan la riqueza del arte barroco quiteño. La nave central está decorada con artesonados de madera tallada y policromada, que muestran el virtuosismo de la Escuela Quiteña. Además, el coro y la sacristía guardan valiosas obras artísticas, consolidando a Santo Domingo como un ejemplo del esplendor religioso y cultural del Quito colonial.
English
Early History
The history of the Church of Santo Domingo dates back to 1541, when the Dominican Order arrived in Quito with the mission of evangelization. Years later, in 1581, construction of the convent began under the direction of architect Francisco Becerra. It quickly became an important religious, educational, and cultural center in the city, renowned for its influence on colonial Quito life.
Exterior Architecture
Its exterior architecture combines Renaissance and Baroque styles. Its imposing bell tower was one of the tallest of its time, standing out in the city’s skyline. The carved stone doorway, with highly detailed reliefs, displays religious figures and decorative elements that frame the entrance. The entire complex faces Santo Domingo Square, marking both a spiritual and architectural landmark in the historic center.
Interior Architecture
The interior of the church features a basilica-style floor plan with three naves accompanied by side chapels. The altarpieces, covered in gold leaf, reflect the richness of Quito’s Baroque art. The central nave is decorated with carved and polychrome wooden coffered ceilings, reflecting the virtuosity of the Quito School. Furthermore, the choir stall and sacristy house valuable works of art, consolidating Santo Domingo as an example of the religious and cultural splendor of colonial Quito.